La película plasma la historia de la familia Weston. Inicia en una mansión en Oklahoma en la que Beverly y Violet, un matrimonio entrado en la tercera edad, enfrenta la soledad propia del nido vacío con ayuda del alcohol, tabaco y pastillas.
La historia comienza cuando Beverly contrata a una empleada doméstica con el afán de ayudar en las labores de la casa, y en los cuidados de su voraz esposa diagnosticada con cáncer de boca. Sin embargo, la contratación de esta empleada tiene tras de sí una oscura intención; cansado de su miserable matrimonio, Beverly desaparece y Violet reclama la ayuda de sus hijas para encontrar al anciano desaparecido-huído.
Es así como al llamado acuden sus tres hijas: la mayor, recién separada del esposo, y con una hija adolescente que no hace las cosas más fáciles. La segunda hija, que sostiene una aventura amorosa con el que cree que es su primo hermano. Nunca abandonó el hogar de los padres, quedando a merced de una madre devoradora que nunca la comprendió y que siempre la colocó en una posición de inferioridad con respecto a la hermana mayor.
Y la menor de todas, Karen, considerada la más ingenua y desplazada de las hijas, menospreciada e ignorada constantemente por su madre.
El desquicio, malhumor y adicción a los fármacos de la matriarca Violet, dejan al descubierto las desdichas de un matrimonio infeliz, una familia disfuncional y desestructurada que termina por fragmentarse tras darse a conocer el suicidio de Beverly. Un cóctel lleno de secretos familiares que, tras ser expuestos ponen a prueba a cada uno de los miembros de este conjunto y cambian el futuro de los Weston.
Agosto es una película que pone de manifiesto la realidad que viven muchas familias disfuncionales y desestructuradas, en las que la voracidad de la misma pareciera tener remedio sólo en la distancia. Sin embargo, la idea romántica de los vínculos familiares, reforzada a través de frases como: “la familia es la familia», “no importa como sea, es tu familia y así debes quererla» o, “la familia no es algo importante, lo es todo», crea en el sujeto conflictos internos que tienen como vehículo el miedo, la culpa y el remordimiento que los avasallan cuando intentan separase de su núcleo primario, el cual atenta contra su estabilidad mental y física.
El alejamiento de la familia sigue siendo percibido como tabú en nuestra sociedad y puede llegar a ser estigmatizado, creando confusión y sufrimiento en el sujeto que se encuentra rebasado por la situación. Agosto nos deja ver la fuerza destructiva que pueden llegar a tener los vínculos familiares, y lo dañinos que son para la salud mental si vivimos en una dinámica familiar donde la violencia es el componente principal.
Por lo anterior es que considero importante replantearnos ¿quién es familia?… “Ser familia” es algo más profundo, por ello sería más sano comenzar a pensar esta estructura en el marco de lo simbólico atravesado por la subjetividad, y no tanto en el orden de lo orgánico. Pensar a la familia en términos de responsabilidad afectiva, basada en el respeto, la empatía y la reciprocidad, será vital la salud mental.
Ficha técnica
Título original:
Agosto (España, Argentina y Chile)
Las vueltas del destino (Hispanoamérica)
Año:
2013
País:
España, Argentina y Chile
Dirección:
John Wells
Reparto:
Meryl Streep, Julia Roberts, Ewan McGregor, Chris Cooper, Abigail Breslin, Benedict Cumberbatch, Juliette Lewis, Julianne Nicholson, Margo Martindale, Dermot Mulroney, Sam Shepard, Misty Upham.
Género:
Comedia, Drama