La caída

Película protagonizada y producida por Karla Souza, dirigida por la cineasta argentina Lucia Puenzo historia de una clavadista cuyo deseo es participar en los Juegos Olímpicos. Tocando un tema de suma importancia como lo es el abuso sexual.

Esta película nos lleva a la reflexión y a interrogantes como ¿En manos de quién dejamos a nuestros hijos? ¿Cuál es el costo que deben de pagar por sus deseos? ¿Cerrarnos de ojos ante lo que estén viviendo? ¿Qué tanto un adolescente puede decidir continuar en algo sabiendo que hay peligro?

Esta película se desarrolla desde un ámbito deportivo, la protagonista Mariel (Karla Souza) nadadora profesional quien está próxima a cumplir 30 años y siendo su última competencia en los juegos olímpicos, acompañada de Braulio su entrenador quién le presenta a Nadia una niña de 14 años, la que va a ser pareja de Mariel en la competencia. Donde la diferencia de edad lleva a Mariel a enfrentar los recuerdos de su adolescencia quien fue abusada sexualmente por su entrenados y nos deja ver que el trauma vivido en esa etapa le trajo como consecuencias graves conflictos psicológicos de ansiedad, obsesión a la sexualidad, inseguridad, miedo y físicos como constantes infecciones vaginales, abuso de medicamentos y dejando entre ver golpes en su cuerpo, con una vida llena de apariencias, donde sus padres, hermanas, el entrenador junto con su esposa e hija hacen constantes reuniones y festejos mencionando la gran familia que son, en donde Mariel muestra su inconformidad con sus sonrisas fingidas, su silencio y buscando la manera de salir del lugar.

Mientras Nadia una adolescente hija única de padres separados, nos muestra su deseo de ser como Mariel. En su inocencia acepta y defiende a su entrenador quien también abusa de ella creando en ella el síndrome de Estocolmo. Irene madre de Nadia, ve en ella un comportamiento diferente y revisa su diario dándose cuenta del abuso, decide dar parte a las autoridades sin éxito y deja continuar el sueño de la niña. Lo contrario de la madre de Mariel, también se daba cuenta de que algo estaba mal, pero decide callar y al final Mariel se lo reprocha. Un secreto a voces, donde todos saben lo ocurrido y callan.

Braulio un hombre maduro, muestra su lado perverso, manipulador, agresivo y controlador. Aprovechando el deseo de las niñas, primero las seduce con la palabra, haciéndoles ver su talento y lo grande que pueden ser, se gana su confianza para después abusar de ellas y cuando todo sale a luz muestra su agresividad con ofensas, se muestra exigente en los entrenamientos, omnipotente haciéndoles saber que por él son buenas en lo que hacen, manipulando a los padres de Mariel para ser rescatado.

Esta historia nos muestra como el deseo, el miedo y los vínculos familiares son componentes importantes ante situaciones de la vida donde se está en riesgo la integridad de la persona. 

Reseña: