Psique y Salud: Neumonía adquirida en la comunidad
La neumonía es una infección pulmonar que puede ser causada por varios microorganismos como virus o bacterias. La neumonía provoca inflamación en la vía respiratoria baja y la acumulación de moco en los pulmones, lo que genera un problema en el intercambio de gases en el pulmón o falta de oxígeno.
La neumonía puede desarrollarse en cualquier época de la vida, siendo las edades más vulnerables los menores de 5 años, las personas mayores de 65 años y aquellas personas que padecen alguna otra enfermedad crónica o autoinmune.
Algunos de los signos y síntomas que presentan las personas son tos, fiebre (temperatura >38oC), falta de aire, dificultad para alimentarse (en los grupos vulnerables), malestar general (en ocasiones), algunas personas pueden referir dolor abdominal. En algunas personas podemos observar datos de dificultad respiratoria (puedes ver nuestro vìdeo de datos de dificultad respiratoria: https://youtu.be/Kw1-2Nr6xd0 ).
Al revisar a estos pacientes podemos escuchar con el estétoscopio la presencia de secreciones o mocos en los pulmones (estertores), silbidos, disminución de la transmisión del aire.
Una de las maneras para prevenir los cuadros de neumonía es la vacunación, por ejemplo vacunarse VS la influenza en cada temporada, vacunarse VS COVID-19 y contra el neumococo (dependiendo del grupo de edad, si se debe o no recibir esta vacuna). Otra forma de prevenir la neumonía en los bebés es la alimentación con seno materno, ya que la madre pasa al bebe anticuerpos (defensas) durante los primeros meses, para protegerse de estas enfermedades.
No es necesario tomar una radiografía de tórax en todos los pacientes con neumonía, esto será decisión del personal de salud, dependiendo del estado de cada paciente.
Un médico puede diagnosticar la neumonía interrogando al paciente, haciendo una exploración física: midiendo la temperatura, valorando el esfuerzo respiratorio, midiendo la frecuencia respiratoria, escuchando los ruidos respiratorios y tomando la oxigenación con un oxímetro de pulso.
El tratamiento consiste en manejar los síntomas y si el/la paciente lo requiere dar oxígeno suplementario (generalmente estos pacientes requieren hospitalizarse) y en algunas ocasiones tratar con antibióticos si la neumonía es ocasionada por una o varias bacterias. Las neumonías por virus no se tratan con antibióticos. No todas los pacientes con neumonía deben permanecer en el hospital, esto lo valorará el personal de salud y dependerá de varios factores como la edad del paciente, si es capaz de alimentarse e ingerir líquidos, el estado de cada paciente.
Las neumonías no complicadas mejoran al cabo de unos 5-7 días, sin embargo puede requerir más tiempo para recuperarse al 100% y regresar a las actividades rutinarias.
** Los pacientes menores de 5 años pueden desarrollar un cuadro de neumonía posterior a haber estado enfermos de un cuadro de gripa y tos, debido a que las secreciones (mocos)
pueden bajar a la vía respiratoria inferior (pulmones) e infectarla. Por lo que es importante que sean valorados por un pediatra.
Recuerda que si presentas un cuadro de tos y fiebre, lo mejor es acudir a una valoración médica y no automedicarte.
Colaboración Eliffantt & Psique y Cultura A.C.
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