Psique y Salud: Accidentes en el hogar
Un accidente es una cadena de eventos y circunstancias que llevan a la ocurrencia de una lesión no intencional mientras el niño se encuentra en algún área de la casa o sus alrededores inmediatos (el patio, el garage, la azotea, etc.)
Los accidentes en el hogar son muy frecuentes en la población pediátrica y el 60% de estos ocurren en este sitio, muchas veces en frente de los padres o cuidadores.
La mejor herramienta para evitar un accidente es LA PREVENCIÓN esto es la preparación y disposición que se hace anticipadamente para evitar el suceso de accidente. Cuando hablamos de prevención, debemos tener en cuenta que prevenir es mucho más importante que tratar. El objetivo de la prevención es provocar un cambio en el saber, en la actitud y en el comportamiento de un grupo predeterminado de la sociedad. Actualmente existe una falta de cultura hacia la prevención de accidentes y no se sabe actuar de manera inmediata en caso de ellas.
La atención prehospitalaria (servicio de ambulancias y técnicos en urgencias médicas), no siempre es de la mejor calidad en México y no todas los servicios de ambulancias están capacitados para proveer atención pediátrica en caso de accidentes, los niños son muy diferentes a los adultos y el manejo es distinto en algunas situaciones de urgencia.
Hay muchas maneras de prevenir accidentes en el hogar, lo más importante es llevar a cabo medidas para evitar algún accidente como por ejemplo: evitar que los menores jueguen en la cocina o el baño, evitar manipular objetos calientes cerca de los niños, evitar jugar o hacer reír a los niños a la hora de ingerir alimentos, los niños deben comer sentados en la mesa y en una silla especial para la edad (si lo amerita, por ej. silla de bebé). Poner puertas de seguridad en escaleras, entrada de la cocina. Almacenar las sustancias tóxicas como limpiadores o desinfectantes en puertas con llave o estantes altos. No guardar medicamentos en casa (que no se utilicen, no tener una caja de medicamentos caducos o que no volverán a utilizarse). Evitar conectar múltiples cables en una sola corriente, retirar los cables del piso ya que los niños pueden jugar con ellos o morderlos, instalar protectores para los enchufes. Tener cuidado de dejar cubetas con agua o tinas con agua cerca de los niños sin supervisión. No permitir que los niños jueguen con controles remotos (por las baterias), imanes, encendedores, cerillos o herramienta. Asegurarse de colocar un casco para andar en bicicleta, patin o patines.
Es de suma importancia asegurarnos que quienes están a cargo de los niños en escuelas, cursos, actividades recreativas o niñeros estén certificados en primeros auxilios pediátricos y que pidamos las certificaciones con las que cuentan para asegurarnos de ello.
Todas las personas pueden prepararse y tomar un curso básico de primeros auxilios, para aprender como deben actuar ante un accidente. Asegúrate que el curso que tomes esté certificado por alguna institución especializada en ello. Los cursos de primeros auxilios para niños y bebés deben ser instruidos por un pediatra o un técnico en urgencias médicas con especialidad en población pediátrica.
Es importante recordar que es mejor y más importante prevenir que tratar. Si estás interesado en tomar un taller de primeros auxilios pediátricos puedes contactarme al correo dra.denim@gmail.com
Colaboración Eliffantt & Psique y Cultura A.C.
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